¿Por qué tu café sabe mal aunque la máquina funcione? Descubre las causas y cómo solucionarlo

¿Notas que el café de tu negocio ha perdido calidad, aunque tu máquina profesional funciona sin fallos aparentes? Si el café sabe mal a pesar de que la cafetera está operativa, puede que el problema no sea mecánico, sino de uso, calibración o mantenimiento.

En SAT Ikari ayudamos cada día a negocios que sufren este problema. Aquí te explicamos las causas más frecuentes de ese sabor extraño en el café y cómo puedes recuperarlo sin necesidad de cambiar de equipo.

1. Falta de calibración de la cafetera

Una máquina de café profesional mal calibrada puede funcionar perfectamente, pero no extraer el café con la presión o temperatura óptimas. Esto afecta directamente al sabor.

¿Cómo solucionarlo?
Ajusta parámetros como presión, temperatura y tiempo de extracción. Si no sabes cómo hacerlo, consulta nuestro servicio de mantenimiento preventivo y lo dejaremos a punto.

2. Molido inadecuado

El molido es clave para un buen café. Si es muy grueso, el sabor será aguado; si es muy fino, resultará amargo. Incluso con la máquina bien, un molido incorrecto puede arruinar el resultado.

¿Cómo evitarlo?
Comprueba la granulometría de tu molinillo y ajústalo según el tipo de café y la receta. Asegúrate de que las muelas del molinillo estén en buen estado.

3. Mala limpieza interna

Los restos de café acumulados en los grupos, filtros o conductos generan sabores rancios o metálicos, aunque la máquina funcione correctamente.

¿Cómo prevenirlo?
Limpia a diario todos los componentes que entran en contacto con el café. Usa productos específicos para cafeteras profesionales y haz limpiezas profundas regularmente.

4. Agua de mala calidad

El sabor extraño en el café muchas veces se debe al agua. Si contiene exceso de minerales o cloro, alterará completamente el perfil del café.

Solución:
Instala un sistema de filtrado adecuado o utiliza agua tratada especialmente para máquinas de café. Te ayudará a mantener la calidad y a prevenir averías por cal.

5. Café mal conservado

Si el grano o el café molido no se almacenan bien, perderán aroma y frescura. Ni la mejor máquina puede salvar un producto degradado.

¿Qué hacer?
Guarda el café en un lugar fresco, seco y alejado de la luz. Usa envases herméticos y no acumules más café del que vas a usar en pocos días.

Conclusión

Una máquina de café profesional que funciona no garantiza un buen café si hay fallos en su uso, ajuste o mantenimiento. Si percibes un bajón en la calidad del sabor, revisa estos puntos clave y vuelve a enamorar a tus clientes con cada taza.

En SAT Ikari, además de reparar, ofrecemos asesoramiento técnico especializado para sacar el máximo rendimiento a tu cafetera. ¡Contáctanos!

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